De las Apps y otros demonios

¿A qué le tienen miedo los taxistas…?


Le tenían tanto miedo al papá de la novia y aun así lo convirtieron en suegro; les estresaba manejar y ahora disfrutan ser choferes; les quitaba el sueño el compromiso financiero hasta que adquirieron su primer TAXI, entonces ¿Por qué ahora tenerle miedo a las Apps?

En pleno 2023 ¿Quién no trae un teléfono inteligente con al menos tres apps?, ¿Quién de la población económicamente activa no utiliza en su día a día WhatsApp? o redes sociales como Facebook, Twitter o Instagram…

Desapareció la Guía Roji y empezamos a usar Google Maps y posteriormente Waze… apareció la pandemia en el 2019-2020, y hubo una explosión de aplicaciones en todas las áreas, sobre todo en el sector de los servicios, y mi pregunta para ustedes es, ¿quién tenía su número celular para contratar su servicio de Taxi? ¿cuántas veces los contrataron al menos una vez por semana? ¿cómo los contactaron, en su caso? ¿en qué porcentaje vieron disminuidos sus ingresos?

Y si bien, aún no existe una app para taxis que cumpla con las necesidades del gremio, sí existen sitios virtuales que usan WhatsApp, Facebook e Instagram para ofrecer y promover sus servicios, pero muchos compañeros del volante por no querer cumplir horarios y reglas, prefieren seguir de manera libre e individual.

¿Necesitan otra pandemia para entender que ese ya no es el camino?

En ningún momento nos referimos a las aplicaciones UBER, Didi, ni Cabify, sino de una forma y estrategia de trabajo, se trata de ustedes, de sus ingresos, del dinero para pagar su renta, su familia, su alimento, su cerveza y su sistema de televisión por cable…

Varios taxistas que se vieron obligados a salir de su zona de confort, me han comentado que con trabajo, el taxi puede recuperar sus usuarios, claro que se necesita que las unidades estén limpias, que se tenga buen trato, que se cobre lo justo, que puedan ser localizables, que se difunda en redes sociales. Si bien Uber y otras aplicaciones te dicen el nombre de su operador, no lo supera el que conozcas al taxista Juan, David o Miguel, que en otras épocas se convertían en parte de la familia, con la confianza para mandar los hijos o hacer mandados.

Los que ya se atrevieron, que se encuentran organizados, comparten experiencias e invitan a que se unan y se comprometan con el cambio.

Y a ti, ¿qué te da miedo? 

Rosaura Cervantes Conde

Directora General