¡De nuevo un ciclista!

Han pasado solo unas cuantas horas en que un chofer de la Línea 2 del Metrobús tuvo que parar en seco la unidad y todo debido a un ciclista que invadió el carril confinado.

El “chiste”, esta imprudencia tuvo consecuencias: 5 lesionados a quienes la aseguradora le entregó pases médicos.

Las cosas no son parejas, si un automóvil o un taxi invade este carril se hace acreedor a una multa que puede ir desde los 4,149 a los 6,224 pesos y en el caso de los ciclistas, no se puede hacer nada. Si hubiese tenido que cubrir los gastos médicos de estas cinco personas, seguro lo hubiese pensado…

Pero en nuestro país como en muchos otros, los ciclistas no pueden ser infraccionados, tan solo ser amonestados verbalmente por los agentes de tránsito. Busqué la información entorno a los ciclistas y encontré el tríptico de “Mis derechos como ciclista” que sólo se concentra a NUNCA ir en sentido contrario o en zigzag, Nunca usar el celular cuando va en movimiento; Nunca transportar a alguien más si solo tiene un asiento; NUNCA transportar objetos que limiten su visión NUNCA sujetarse de otros vehículos; NUNCA pedalear bajo los efectos del alcohol y drogas, y NUNCA usar audífonos que lo aíslen de los sonidos viales, situación que a la que muchos no se sujetan.

Estuve investigando sobre las posibles penalidades en otras partes del mundo y no las hay, a lo más está Países Bajos, regulando la velocidad máxima de las bicicletas eléctricas para que no (velocidad máxima de fábrica) 25km/h, mientras, en Reino Unido, si bien no existe una velocidad máxima para los ciclistas, donde recae la penalización es por si éstos llegasen a causar un daño físico a cualquier persona que incluso podrían ir a prisión. 

No se trata de una cacería de brujas, pienso que si exigen derechos también deben tener obligaciones, e insisto, lo más importante es salvaguardar la vida de todos y tener una convivencia real, sana… de bien común.


Espero sus comentarios en @Preventiva50


Rosaura Cervantes Conde

Directora General